lunes, 31 de octubre de 2011

WINTER SANDALS

Gooooooooooooood Moooooooooooorning Vietnam!!
Por fin es lunes.

Ya era hora. Por fin ha llegado el frío. No podía más. La cosa parecía que no iba a ser para tanto, pero se ha ido complicando y ahora mismo estoy desahuciado por la moda.
Llevo 4 meses con las mismas chanclas. Al principio de verano elegí  varios modelitos de fashionclanclas. (chichof, canacas, hawaianas…). A tutiplein…
En el transcurso del verano iba de garito en garito cual gallito de pelea mostrando mis espolones… dedos al viento. Pero el tiempo hizo mella. Unas no sobrevivieron al asfalto. Otras se perdieron en la espesura de playas y terrazitas de noche.
En resumidas cuentas, que desde hace como unos dos meses sólo me quedaba un único par. Verdes Kaki que es lo que se llevaba este verano, con una enorme palmera con hojas blancas. En realidad eran así cuando las compré, ahora son de color verde claro desuniforme  y con una especie de pájaro blanco en la suela. Con un pequeño zócalo beige claro haciendo aguas que rodea todo el perímetro de la suela y que es fruto del sudor. Eran mullidas y confortables, pero se han ido convirtiendo en una especie de invento ergonómico con unos enormes socavones en la parte trasera donde se incrustan perfectamente mis talones con cierta batiente interior o inclinación lateral debido a mi querencia natural. En la parte delantera unos profundos surcos donde se aposentan mis dedos. Y la cálida textura del caucho ha tornado a dura tela asfáltica por el efecto de la traspiración (sudorcete).  Una delicia, pero daba la sensación de ir caminando sobre unas barcazas de terracota.  Joe! pero es que no tengo yo la culpa. Es imposible comprar unas chanclas nuevas en octubre. Y calor para ello ha hecho. O eso pensaba yo….en internet encontré una delicatesen de la moda, un capricho reservado a unos pocos, una genialidad tangible, un sueño forradito de pielecita suave. Las winter sandals, una ilusión hecha realidad. Ideales para la calle o para casa. Un fondo de armario, perfecto para llevar con calcetín, calcetín blanco, (un clásico) aunque presiento que en este país tardará en entenderse…. ahora ando buscando el complemento perfecto, unos calcetines gordos, de esos que llevan para meter los dedos… ¿Cómo si no?


  


Genial. Por fin es lunes. Feliz puente. Feliz semana y Feliz día del padre… y no quiero dar ideas.



OP


lunes, 24 de octubre de 2011

CUANDO LLUEVE HACIA ARRIBA

Gooooooooooooood Moooooooooooorning Vietnam!!
Por fin es lunes.

Muchas veces pienso en porqué hacemos todo tan difícil. Porqué no somos capaces de pedir lo que queremos. Porqué tenemos tantos miedos. Porqué somos tan cobardes con aquello que nos interesa. Cobardes con nosotros mismos. Porqué si alguien nos gusta no se lo decimos. Porqué si amamos a alguien le evitamos. Porqué cuando tenemos miedo lo disimulamos. Porqué si alguien nos ama jamás le decimos te quiero. Porqué a sabiendas que lo hace bien, jamás lo reconocemos. Porque si nos gusta su estilo, le bombardeamos. Porqué a quien más queremos, le gritamos. Porqué si alguien es bueno ponemos miles de reparos a su trabajo. Porqué si nos gusta como viste, le humillamos. Porqué cuando algo sale mal siempre reñimos pero si sale bien pocas veces  felicitamos. Porqué si buscamos cariño, chocamos. Porqué con tanta gente mentimos y nos quedamos, cuando estamos deseando irnos. Porqué seguir haciendo “lo de toda la vida”, si otra cosa es lo que quiero. Porqué si nos gusta lo que hace y como lo hace, no decimos nada, por si acaso…

Complicados pero inteligentes, nos cuesta entendernos y aceptarnos, mucho más a los que nos rodean. Que poco nos queremos. Pensando en todo ello un día decidí cambiar algo de eso en mí. De mí y para mí. ¿Por qué no decir te quiero a las personas que quiero? ¿Por qué no dar las gracias siempre? ¿Por qué no entender al que tengo enfrente tanto como si estuvieras viendo en su piel? Y sobre todo ¿Por qué no perdonar?... mejor esperar, cuando llueva hacia arriba…

Siempre con esa capacidad para arruinar y frustrar los proyectos que me interesaban. Cien mil motivos para no empezar con las cosas que tanto deseaba: “no es el momento, no tengo dinero, no va a funcionar, no sé qué va a pensar de mí, no, no, no…”, pero pocas razones para dar el primer paso. Sencillo, se trata de hacer lo que quiero, lo que pienso o lo que deseo: A veces tan tan sencillo como coger el teléfono y marcar; tan tan sencillo como escuchar sin preguntar, o como abrir el ordenador y ponerte a escribir…

Tan poco que perder, tanto que ganar.
Esta semana lo voy a hacer de nuevo. Yo lo intento y cuando lo consiga lo celebro.

Genial, por fin es lunes. Sin miedo. De esta semana no pasa.



OP


lunes, 17 de octubre de 2011

BEAUTIFUL DAY


Gooooooooooooood Moooooooooooorning Vietnam!!
Por fin es lunes.


Ese día me levanté pensando en qué podría regalarle. Todo me resultaba inadecuado y monótono. Teniendo en cuanta su fuerte personalidad y que justo venía de Milán. Debía ser algo cotidiano pero en un toque diferente.
Recordé aquella fantástica tienda que me gustó tanto. La Clé.

Allí fui. Dejé el coche en el parking de Barceló y fui andando. Me encanta caminar por esa zona. El Madrid de toda la vida. Pasear por esas callejuelas, donde se concentran e intensifican los olores, donde la luz del sol queda tamizada dando claroscuros y sombras. Donde apetece ir despacio por sus aceras deleitándose observando escaparates y edificios.  Un ejercicio con sabor.

La Clé, en la calle del Pez 12. Son de esas tiendas que siempre encuentras algo que te llama la atención. Son diseñadores que trabajan a partir de materiales recuperados de la industria. Piezas exclusivas y únicas. Perfecto, justo lo que buscaba. Ya dentro de la tienda, miraba con detenimiento cada una de las estanterías. Ropa, complementos…. además de coloridos, originales y exclusivos… son ecológicos. Me quedé prendado con uno de sus bolsos.

Era pronto. Habíamos quedado un poco más tarde. Yo estaba inusitadamente nervioso. Creo que sí le gustará pero siempre queda esa pequeña duda. Decidí sentarme a tomar algo para hacer tiempo hasta la hora de la cena. Justo en la paralela, o la siguiente, no lo recuerdo con exactitud pero apenas 2 minutos caminando está La Rue Creperí, en Espíritu Santo 18. Un pequeño y coqueto bar al más puro estilo parisino, donde además de desayunar y merendar creps al estilo galo, puedes disfrutar de un fantástico café frappe. Tiene esas mesitas pequeñas donde es un placer sentarse a descansar mientras te trasladas con los aromas de su café. Un trocito de Francia en medio de Malasaña. Porque Malasaña de día es otra historia.

Era la hora. Cogí el coche apresurado y nervioso. Puse U2, esto siempre me funciona, para relajarme. La primera canción que sonó fue Bautiful Day. Biiiiiiiiiiiiiiiiiien. Sin duda una señal.
Habíamos quedado en la terraza de hotel Oscar Room Mate, en la plaza Vázquez de Mella. Me encanta este sitio además de las vistas de Madrid en lo alto, su decoración es fantástica, incluso con tumbonas para ver las estrellas mientras saboreas sus increíbles mohitos. ¿Y para cenar? algo de Japo en plan informal. Es perfecto. Además hay un parking justo en la misma plaza. Un sitio ideal.

Cuando llegué estaba ya esperándome en la mesa, sonreí y nervioso como un niño pequeño no pude contenerme, sin mediar palabra le di su regalo. El bolso más diferente, exclusivo y ecológico de Madrid. Un súper bolso fashion de Madrid… Diana!! Le encantó.
Empezaba la noche de la mejor forma. Disfrutamos de las vistas y la cena, y después…. después a seguir disfrutando….

Esto es Papi Urbano.  De Amigo a Amigo. Otra forma de ver la vida. Noche. Ocio. Restauración. Estilo de vida.
Síguelo en en el blog http://papiurbano.blogspot.com Cada jueves para disfrutar los fines de semana. www.papiurbano.com (SOLO POR SUSCRIPCION EN EL BLOG)


Genial, por fin es lunes. Y todos los Jueves Papi Urbano…. y algún miércoles Papi con amor.


 OP





lunes, 10 de octubre de 2011

DOS HORAS EN ARABIA


Gooooooooooooood Moooooooooooorning Vietnam!!
Por fin es lunes.

 A penas habían pasado tres días desde el glorioso Domingo.
Sonó el sonido del mensaje del wastsapp de mi móvil y apareció en la pantalla un mensaje de alguien que no conocía ¿o eso creía yo? Era la amiga de Laura.
Me preguntaba por un médico que yo dije conocer en la cena que tuvimos los cuatro. La famosa cena. Después de mandarle un sms con la web para que  viera las especialidades del médico, continuamos cruzando mensajes sobre lo sórdido de la cena del domingo anterior. No sé muy bien cómo pero al final terminamos hablando de viajes a otros países. “A mí me llama especialmente la atención la gastronomía de allí donde voy, pero hay partes del mundo que no conozco”. Y en ese momento se ofreció para ir conmigo a un lugar de Madrid donde se elaboran de forma tradicional platos marroquís.
Quedamos para el fin de semana. Y llegó el viernes. Yo estaba nervioso y emocionado a la vez. Otra cita con alguien que no apenas conozco, pero estaba vez no había nadie que nos acompañara. Si lo pensaba mucho la situación me hacia tensar. Quedamos en la puerta del restaurante Arabia (Piamonte 12). Apenas recordaba su cara pero entendí que cuando llegara lo haría. Fue muy puntual. Nos dieron mesa en el suelo. Jamás había comido en el suelo. Genial, nuevas experiencias. Comenzamos hablar y me confesó que la cena anterior con Laura y mi amigo había sido algo tensa. Poco a poco nos relajamos. Decimos pedir. La carta no es muy larga, pero si muy completa. Pensada para españoles. Empezamos a hablar sobre la cultura de otros países. Yo estaba auténticamente abducido por la conversación, el ambiente, su cuidada decoración, sus olores, la música y luego la comida… Me dejé llevar. Que disfrute para el paladar. Empezamos con humus de garbanzo (no sé si hay humus de otra cosa), luego el cuscús con pollo y finalmente el cordero con pasas y especias, acompañando con vino. La conversación era muy, muy amena, parecía conocer al dedillo países árabes como Marruecos o Turquía. Yo nunca estuve allí por lo que me fascinaba escuchar todo lo que me contaba. La comida se prolongo largo y tendido, nunca mejor dicho, porque acabé prácticamente tumbado entre los placenteros cojines. Fantásticas dos horas en Arabia.

La noche había empezado fantásticamente, ya no podía parar.
Cuando has tomado una botella de vino, lo mejor en Madrid es olvidarte del coche. Rendido ante los encantos del mundo árabe le pedí que me sorprendiera con alguno otro sitio para tomar algo. El objetivo es que no estuviera muy lejos para poder ir andando.  Dicho y hecho. Fuimos a la Turba (Conde de Xiquena 3). Casi esquina con Almirante, que es la paralela de Piamonte. 300 metros andando desde el Arabia. Perfecto.
La turba me sorprendió. Han conservado la fachada de lo que fue antaño una carbonería. Carbonería, suena antiguo. Nada más lejos de la realidad. Un lugar moderno al más puro estilo newyorkino . Música lounge (tranquila pero no para dormir) y unos camareros que te convencen cuando preparan los combinados. La noche iba subiendo. Mi anfitriona estaba resultando ser una auténtica erudita de la noche. Dos de dos.
Dos cocteles después yo veían la vida de otra forma. Decidimos hacer una pausa en el camino. En pleno Chueca, donde el bullicio y frenesí no tiene stop las noches de los fines de semana, hay un lugar que yo considero un oasis. Está en Infantes 9 casi esquina con la plaza Vazquez de Mella. Apenas un peso de 6 o 7 minutos desde La Turba.
Una noche magnifica, la temperatura perfecta. Un paseo por las callejuelas de ese fantástico barrio, Chueca. Recreado en su particular arquitectura. Podría estar en cualquier parte del mundo, pero no. Es Madrid. Qué grande es Madrid. Cena étnica, copa cool y ahora… ahora un poco de tranquilidad.
Especialmente acogedor, me siento…te sientes tranquilo, dentro del bullicio. Este local tiene varios rincones donde sentarse y conversar. Mi favorito junto al espejo antiguo redondo de la entrada. Butacas altas, una barra estrecha con la pequeña lámpara, y algún adorno. Un ventilador que viene desde el suelo. Las sensaciones son muy, muy diferentes… pedimos un gin que sirven en copa grande con mucho hielo y tónica azul. Exprimen un poco de limón sobre la misma copa lo que hace que al sabor se una un increíble aroma que se mezcla en la boca.
Cris, mi anfitriona y yo empezamos a hablar sobre temas más personales, el ambiente da para esto y para mucho más…


Esto es Papi Urbano.  De Amigo a Amigo. Otra forma de ver la vida. 
Noche. Ocio. Restauración. Estilo de vida.
Cada jueves en el blog http://papiurbano.blogspot.com
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Genial, por fin es lunes. Y todos los jueves Papi Urbano…. y algún miércoles Papi con amor.


OP




lunes, 3 de octubre de 2011

TANINO


Gooooooooooooood Moooooooooooorning Vietnam!!
Por fin es lunes.


Ayer fue domingo. No es un día para salir, o eso pensaba yo.
Todo empezó una semana antes en un concierto de una sala pequeña en la que toca uno de esos grupos que no conoces pero que al final, por su música, por su estética, por su simpatía o por qué se yo, te terminan gustando. Y allí es donde conocimos a Laura.
Una semana después y tras muchos mensajes de textos mi amigo se decidió a quedar los cuatro. ¿Por qué cuatro? Bueno son esas pequeñas cosas que tiene la vida.
Y allí estaba yo con mi amigo en una cita casi a ciegas. Empezaba a recordarme a esos capítulos de la serie Sexo en Nueva York, que tras una fiesta una noche, haces amigos y luego terminas haciendo tus propias reflexiones sobre las relaciones humanas.
El caso es que quedamos en Tanino (Valleheroso 25) que es, como poco, uno de esos lugares curiosos y muy original, que nació en Marbella y luego vino a Madrid. Su ornamentada decoración hace que sea acogedor y chic al mismo tiempo. Mi amigo y yo nos sentamos en una mesa que por casualidad era la que Laura había reservado. Curioso. Laura se hizo esperar y llegó un poco tarde, pero finalmente llegó. Muy guapa con el pelo corto, camiseta azul de tirantes y una graaaan sonrisa y además después pude constatar que con una gran personalidad. No venía sola.
Después de un rato sentados en la mesa, yo apenas hablaba pero Laura y mi amigo parecían conocerse de toda la vida. Entre risas fuimos probando una selección de tapas muy, muy ricas. Para ser sincero me encantaron las croquetas caseras y una tabla de empanaditas. Lo acompañamos con un buen vino blanco de rueda.
Charlábamos amigablemente los cuatro. Desde luego se había roto el hielo.  Yo me sentía cómodo. Una delicatesen de chocolate para terminar la noche…o eso creía yo.
El domingo es uno de esos días en los que piensas que todo estará cerrado y que la gente no sale porque al día siguiente hay que ir a trabajar. Pues no.
Nos fuimos al Honky Tonk (Covarrubias 24) una sala de música en directo de las de toda la vida. Había una sesión de música en directo. Música en directo todos los domingos. Los tíos que tocaban eran buenos, realmente muy buenos, aunque como me ocurre la mayoría de las veces, no recuerdo el nombre del grupo; pero lo que sí recuerdo es  que tocaron un tema de la BSO de la película  Crash, maybe tomorrow, de Stereophonics, sin duda un presagio…
Laura y mi amigo, entre baile y baile seguían divirtiéndose. Pero Laura no había venido sola…

Esto es un anticipo. Es Papi Urbano.  De Amigo a Amigo. Otra forma de ver la vida.
En su blog cada jueves para complicarte los fines de semana, incluidos los domingos. www.papiurbano.com


Genial, por fin es lunes. Este Jueves nace Papi Urbano…. pásalo.


OP