Por fiiiiiiin es lunes. (finisciu, oghje hè luni.)
No se trata de hacer lo que te apetezca en cada momento, más bien
de dejarte llevar por tus sentimientos. Sean los que sean. La RAE dice: “aparentemente sin causa” entre otras
acepciones, pero realmente ser una persona espontánea no tiene porque ser
alguien que hace las cosas sin pensar. Mas bien puedo pensar de que se trate de
lo contrario. El objetivo de lo inesperado es la sorpresa que debe llegar
siempre de forma imprevista.
No esperar y que llegue. Y que eso que llegue además sea de
nuestro agrado. Al fin y al cabo son acciones que no tienen porque requerir un
motivo aparente y que atienden a lo racional jugando con las emociones. Es
emocionalmente racional. Una palabra, una llamada, una visita… un regalo.
Pero sin duda la definición, de todas las que he escuchado, y que
mas me llamó la atención fue la de: espontaneidad, la exquisita libertad de lo inesperado. Exquisita
libertad es sentirse lo suficientemente libre, capaz y delicado como para
generar de forma atrevida acontecimientos que generen expectación, sorpresa y
agrado a la vez.
Ser libre y sentirte libre de hacer y decir lo que piensas en el
momento adecuado. Debería haber cursos de esto y no improvisar tanto.
Genial. Por fin es lunes. Espontáneamente apropiado.
OP
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